Es una planta cultivadísima en los hogares. Parte de ese éxito se debe a que tolera las altas temperaturas, bajos niveles de luz y de humedad.
LUZ
Dale mucha luz, pero no lo pongas al sol.
En sitios con poca iluminación puede perder las hojas.
Las variedades que tienen las hojas manchadas en blanco o en amarillo, necesitan más luz; acércalos a la luz para que no pierdan ese variegado ornamental (por ej., cerca de una ventana, pero sin que le dé el sol o pocas horas).
TEMPERATURA
En invierno, lo ideal es que no baje de 13º C y en verano una máxima de 24º C.
El Ficus benjamina puede vivir al exterior en climas donde no hay heladas (temperatura que no baje de 0º C), incluso a pleno sol. Ejemplo: la Costa Mediterránea.
Puedes sacarlos al exterior con buen tiempo, a semi-sombra y en otoño meterlo dentro otra vez.
Mejor que no tenga que soportar corrientes de aire dentro de las casas.
HUMEDAD
No es exigente en humedad ambiental, pero agradece un fino rociado diario, excepto cuando la temperatura baje de 15º C.
En verano, el pulverizado le viene especialmente bien. Sobrevirá incluso en un ambiente seco por calefacción y aire acondicionado; aunque no pongas el Ficus cerca de la calefacción (aire muy seco).
RIEGO
No más de 2 veces por semana en verano, y una vez cada 8 ó 10 días en invierno. Cuidado con regar en exceso. No riegues hasta que no esté casi seca la tierra y asegúrate que no permanece agua estancada en la maceta por tener el agujero de drenaje obstruido.
ABONO
Echa cada 15 días en primavera y verano un fertilizante líquido según las instrucciones de la etiqueta. Si puede ser, que sea uno especial para plantas de hojas verdes. Aporta hierro al agua 1 vez al mes, así evitarás un posible amarilleo de las hojas por su carencia.
TRASPLANTE
Cambia a una maceta un poco mayor cada año, en primavera. Si es una planta demasiado grande para manipularla con facilidad, sustituye anualmente sólo la capa superior del sustrato (un par de centímetros) por otro nuevo.
Consejo: Poda de despunte
Para que se mantenga frondoso, despunta cada 2 ó 3 meses (no lo hagas en invierno). Corta las 2 ó 3 últimas hojas de cada ramilla terminal. Cuidado con las gotas que caen al suelo de látex blanco pegajoso.
PROBLEMAS
- ¿Se le caen las hojas?
El Ficus benjamina cuando tiene algún problema reacciona normalmente tirando hojas. Sin embargo, aunque se defolie totalmente, no lo tires, tiene capacidad para rebrotar de nuevo. Ayúdale abonando. Las causas de caída son:
• Al cambiar de sitio el ficus .
• Cuando se compra un ejemplar y hasta que se aclimata a su nueva casa. Esto se suele llamar "el síndrome de la casa nueva".
• Si está puesto en un sitio con poca luz. Quiere más luz.
• Si está puesto en un sitio demasiado frío o baja de golpe la temperatura. Esto suele aparecer en finales de otoño o invierno. Si está haciendo mucho frío, déjale a la planta la calefacción encendida por la noche con poca potencia.
• Por estar expuesto a corrientes de aire.
• También puede tirar hojas por falta de agua y por lo contrario, el exceso de riego (en este segundo caso caerán amarillas).
• Por regar con agua fría. Esto puede dañar a las raíces y provocar la susodicha caída de hojas (sobre todo si no está acostumbrado a ello).
• Ten en cuenta también, que la planta pierde hojas de forma natural en primavera cuando crecen las nuevas.
- ¿Hojas ennegrecidas?
Eso puede ser porque la hoja ha tocado una ventana fría. Apártala de ahí.
- ¿Puntas de las hojas secas?
Ficus sometido a corrientes de aire. Quita la planta de donde esté y mantén las puertas cerradas lo que puedas.
Las hojas salen en primavera pequeñas y la planta tiene un color opaco, como sin vida.
Eso es que necesita ser trasplantada. Hazlo en primavera. Si es una planta grande, en lugar de trasplantarla a otra maceta mayor, sustituye la capa superior del compost (2 ó 3 centímetros) por otro nuevo. En este último caso abónala; en el primero no lo hagas hasta pasado 1 mes.
- ¿Hojas amarillas?
Exceso de riego o carencia de hierro en la tierra. Riega menos si el sustrato está empapado y aporta un fertilizante con hierro como los quelatos de hierro.